Diseño de stands para ferias y eventos: cuáles son las tendencias

Puede que la primavera sea la época en la que más ferias sectoriales se celebran. El buen tiempo, las ganas de cambiar de temporada y también las novedades de las primeras marcas se agolpan para los lanzamientos previos al verano.

En estas ferias, sin duda, uno de los elementos que más llaman la atención de los visitantes tiene que ver con el diseño de stands.

No es la misma predisposición a abrir un diálogo que puede desembocar en negocio la que tiene lugar en un stand de marca en el que se ha buscado ofrecer la información, imagen e incluso valores de la empresa a través de diseño de espacios, colores y mensajes que uno que se nota que ha sido improvisado.

El apostar por este tipo de diseños, sin duda, hace que el interlocutor entienda la seriedad y la calidad de producto de quien quiere negociar con él. De ahí que no haya que dejarlo a un lado cuando se planifica la presencia en los distintos foros y ferias tanto locales como nacionales o internacionales.

El avance de las nuevas tecnologías en el día a día de público y empresas ha supuesto un punto de inflexión, también, en lo que se muestra en exposiciones y eventos como catálogo, presentación o como propio stand.

Incluir pantallas, dispositivos inteligentes con los que el público pueda interactuar para encontrar lo que busca o la optimización de todo el material audiovisual que sirve de narración de la propia historia y oferta de la compañía son claves para poder ofrecer a quien visita el stand una experiencia integral que unifique el mensaje más clásico con las últimas tendencias de la calle.

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Tres razones claves para apostar por la innovación y el diseño cuando se acude a las ferias

1. Branding: hacer marca. Es clave aprovechar estas reuniones profesionales del sector para lanzar un mensaje claro y alto que hable de la propia marca. Colores, espacios abiertos y útiles y todo lo que conlleva el diseño de un stand por parte de expertos con la asistencia y beneplácito de las marcas es vital para ser capaz de transmitir un mensaje. El stand no deja de ser una carta de presentación y no apostar por innovar y por mostrar las fortalezas es un error que se acaba pagando caro en este tipo de eventos.

2. Apuesta por la innovación: incorporar las novedades tecnológicas del sector dentro del propio espacio desde el que cada marca se relacionará con su público potencial es hablar de una empresa moderna, que incorpora los avances a su línea de producción de productos y servicios y que no se queda anclada en un pasado.

3. Atraer miradas y hacer negocios: ese es el fin de cualquier stand. Ser capaz de llamar la atención a un público que, en realidad, está ahí porque le interesa consumir en ese sector. Atraer con software, monitores, estaciones de carga, guiños a la Inteligencia Artificial o incluso a la Realidad Virtual garantiza, cuanto menos, una parada que puede ser clave para presentar los productos que se pueden ofrecer desde la marca.